China y stablecoins

China y los stablecoins: Medidas regulatorias y futuro

En los últimos años, stablecoins como Tether (USDT) y USD Coin (USDC) se han convertido en una parte importante del mercado global de criptomonedas. Estos activos digitales, ligados al valor de las monedas fiat como el dólar estadounidense, ofrecen a los usuarios estabilidad y menor fluctuación de precios en comparación con otras criptomonedas como bitcoin o ethereum. Sin embargo, China, a pesar de su posición activa en tecnología digital y blockchain, adopta una postura dura con respecto a los stablecoins. En este artículo discutiremos cómo China regula el uso de stablecoins, por qué el país restringe su uso y qué alternativas ofrece en forma de yuan digital (e-CNY).

1. ¿Qué son los stablecoins?

Los stablecoins son criptomonedas cuyo valor está vinculado a un activo estable, más comúnmente a una moneda fiduciaria, como el dólar estadounidense o el euro. Esto hace que los stablecoins sean menos volátiles en comparación con las criptomonedas tradicionales. Los populares stablecoins incluyen Tether (USDT), USD Coin (USDC) y Dai.

Los stablecoins se utilizan activamente para el comercio de criptomonedas, transferencias y pagos, y son una especie de activos digitales que permiten a los inversores cubrir los riesgos asociados con activos de alta volatilidad.

2. ¿Por qué China restringe el uso de stablecoins?

2.1 Amenaza a la estabilidad financiera

La principal razón por la que China restringe el uso de stablecoins es su preocupación por la estabilidad financiera. Los stablecoins, bajo el control de empresas privadas, pueden convertirse en una amenaza para la política monetaria del país y los flujos de efectivo. Si un gran número de usuarios comienzan a usar stablecoins en lugar de moneda nacional, esto podría debilitar el impacto del Banco Central de China en la economía y el control de la masa monetaria.

Además, los stablecoins pueden utilizarse para el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y otras transacciones financieras ilegales, lo que también preocupa a las autoridades chinas. Los stablecoins, atados al dólar estadounidense, pueden aumentar la dependencia de las monedas extranjeras, algo que no es deseable para un gobierno chino que busca reforzar la independencia de su economía.

2.2 Competencia con el yuan digital (e-CNY)

China está desarrollando activamente el yuan digital (e-CNY), que es la moneda digital estatal controlada por el Banco Central de China. A diferencia de los stablecoins, el yuan digital está totalmente regulado por el Estado y otorga al gobierno el control total de las transacciones.

El yuan digital chino, que se está probando activamente en varias regiones del país, es un competidor para los stablecoins privados como Tether y USDC. Por lo tanto, para proteger los intereses del yuan digital y asegurar el control de los flujos financieros internos, China restringe el uso de stablecoins privados.

2.3 Imposibilidad de control completo

Los stablecoins son administrados por empresas privadas y su uso no es totalmente regulable por el Estado. A diferencia del yuan digital, que está totalmente centralizado y controlado por el Estado, los stablecoins no pueden integrarse en un sistema de normas regulatorias globales, lo que dificulta la supervisión y el control de su uso. Para China es importante poder rastrear todas las transacciones y, por lo tanto, los stablecoins privados no cumplen con estos requisitos.

3. Medidas de China para regular los stablecoins

China está elaborando activamente medidas reglamentarias para limitar el uso de stablecoins en el país. En 2021, el Banco Central de China anunció que seguirá luchando contra las criptomonedas y los stablecoins no registrados, limitando su uso en transacciones financieras y comerciales. Esto incluye la prohibición de operar intercambiadores de criptomonedas que permiten el comercio de stablecoins, así como el bloqueo de plataformas que proporcionan servicios de intercambio y transferencia de stablecoins.

China también refuerza los controles sobre las plataformas de criptomonedas nacionales y exige a las empresas que operan con criptomonedas que cumplan con estrictas normas y estándares que cumplan con los requisitos del Banco Central.

4. Yuan digital como alternativa a los stablecoins

Una de las principales formas en que China aborda el problema de la competencia de los stablecoins es promoviendo el yuan digital (e-CNY). Es una moneda digital estatal que está diseñada para reemplazar a los stablecoins privados y convertirse en la principal herramienta de pago y liquidación tanto dentro como fuera del país. A diferencia de los stablecoins, el yuan digital está totalmente regulado por el gobierno chino, lo que da al estado el control total de su circulación.

El yuan digital permite un mayor nivel de seguridad, autenticación y transparencia de todas las transacciones, lo que lo convierte en una herramienta ideal para pagos digitales. Las autoridades chinas están probando activamente el e-CNY en varias ciudades y planean ampliar su uso en el comercio y los cálculos internacionales.

5. El futuro de los stablecoins en China

A pesar de las duras medidas contra los stablecoins, el mercado de criptomonedas en China sigue evolucionando y no se puede descartar la posibilidad de un cambio de política en el futuro. Sin embargo, teniendo en cuenta la promoción activa del yuan digital y el monitoreo constante de las operaciones de criptomonedas, es poco probable que China cambie su posición hacia los stablecones privados en un futuro próximo.

Es probable que el futuro de los stablecoins en China se deba a su uso limitado, mientras que el yuan digital se convertirá en la principal herramienta para el mercado interno de pagos y la integración de China en el sistema financiero global.

Conclusión

China restringe activamente el uso de stablecoins en su sistema financiero por temor a su impacto en la estabilidad financiera y la soberanía económica. En respuesta a este desafío, China promueve el yuan digital, que otorga al gobierno el control total de las transacciones digitales y ayuda a fortalecer el papel del yuan en el comercio internacional.